HAY QUE DECIRLO. – En los casuales encuentros del periodista con personajes pertenecientes a la clase política (no hay nombres, solo situaciones); lo que de inicio surge es la consabida pregunta del político… Qué, ¿cómo se ve el panorama? ¿cómo andan las cosas? ¿qué dicen los de MORENA?  ¿y los del PAN, cómo andan?… Etcétera, pero, no preguntan cuál es el actual y verdadero sentir ciudadano.

Vale comentar que de un tiempo a la fecha, digamos cuatro meses atrás, nos ajustamos en nuestro trajinar personal, a realizar recorridos por diferentes rumbos de la ciudad, saludando a viejos amigos, a otros no tanto, a conocidos, además de ser involuntarios escuchas de baladíes conversaciones entre hombres y mujeres, se trata de una andanza encaminada al ejercicio físico.

Pues bien. – En ese caminar, lo captado de esas conversaciones ajenas, casualmente coinciden de una u otra manera, dejando escapar en sus expresiones su sentir personalísimo… “De verdad ya ni chinga el gobierno”.  “Qué vamos a hacer con todo tan caro”.

Son voces que significan la válvula de escape a todas esas presiones que se derivan de la incontrolable carestía, carestía que ha pulverizado los salarios de todos, no únicamente de las clases populares.

Es decir, existe un encabronamiento ciudadano generalizado en contra de políticos de todos los niveles, en contra de institutos políticos, llámese MORENA, PRI, PAN, PRD, PT, etcétera, ya que sus representantes en las diferentes instancias de gobierno han dejado constancia de que poco o nada, les importa la calidad de vida de los ciudadanos comunes, esos ciudadanos cuyas familias obligadamente día a día deben ceñirse el cinturón.

Así que, en estos momentos intentar llevar a cabo un sondeo para conocer la opinión ciudadana, sobre el actual proceso en el que se elegirán diputados locales para renovar el Congreso del Estado, será tanto como estar dispuestos a recibir justas mentadas de madre sin molestarnos, esto quiere decir que el horno político en Tamaulipas no está para bollos.

En el escenario hay claras muestras de que son los políticos representantes de la ciudadanía, siendo del partido político que fuere, los que disfrutan de una vida digna, sin el mayor esfuerzo, ganando envidiable salario que les permite, viajar, vacacionar, festejar y demás muestras de solaz, mientras que el pueblo resiente estoicamente en silencio, todos los aprietes de cinturón provocados por la brutal e incontenible inflación.

Si hay alguien que quiera destacar preguntando en estos momentos a colonos, campesinos, obreros, amas de casa, jornaleros, jóvenes, que piensan de tal o cuál aspirante a diputado local por el Décimo Séptimo distrito electoral con cabecera en El Mante, oraleee… éntrenleee… NI MODO, HAY QUE DECIRLO…