Por / Jesús Avila Murillo /
HAY QUE DECIRLO. – Los caprichitos personales, la insatisfacción de los militantes, el vale madrismo de los líderes y la permanencia de los mismos, son hechos que han llevado al cansancio a los integrantes de la familia priísta mantense.
Como reflejo de ese hastío, de manera continua se están dando las dimisiones a la militancia de los más insaciables priístas, de esos que no aceptan que las posiciones representativas, otorgadas y facilitadas por su partido, tienen un ciclo de vigencia y se aferran tratando de hacer valer sus caprichos e intereses personales y, al no lograrlo, simplemente abandonan las filas del instituto que les concedió la oportunidad de contar con presencia en el medio político local.
De ese lastimoso estado de hechos, lo que se observa extramuros del Comité Directivo Municipal del Partido Revolucionario Institucional de El Mante, son palpables muestras de desunión, de incompatibilidad de principios partidistas, de ruptura, ejemplo de que nunca fueron, lo que decían que eran; PRIISTAS, de hecho, el PRI ya no tiene el respaldo de los cacareados sectores, como la CTM, CNC, CNOP, etcétera.
Esa desunión también se está observando entre los candidatos a presidente de la república, senadores por Tamaulipas, diputado federal por el VI Distrito, afectando enormemente el proyecto político del CP Julio César Portales Martínez, como candidato a la presidencia municipal de El Mante.
Como resultado del obligado pago a esa cara factura, se puede adelantar el fracaso en las urnas electorales para el PRI y sus candidatos, fracaso que servirá para echar las últimas paletadas de tierra a lo que será su sepultura como partido político, la verdad será escrita el día 01 de julio próximo…. NI MODO, HAY QUE DECIRLO….