HAY QUE DECIRLO. – Desde el trienio de gobierno municipal 1969-1971 que presidió el LAE Abelardo Osuna Cobos, en que un comunicador no tenía participación, ni presencia política, en una planilla de ayuntamiento.

En aquellos años, correspondió a Alfonso Ostos Maldonado (QEPD), director y propietario de la revista semanal “7 Días”, representar políticamente a la asociación de periodistas de El Mante como regidor suplente.

Cabe hacer mención que en aquellos años el PRI no tenía oposición política y, sería a través de la CNOP, como se tomó en cuenta a la asociación de periodistas, para que designará uno de sus miembros como suplente en una regiduría.

En esta ocasión, tras concluir el proceso electoral 2017-2018 en el que se eligió el nuevo ayuntamiento mantense, nos encontramos con dos comunicadores que figuran como regidores suplentes, uno en la planilla ganadora del PAN y otro que representa una suplencia en la regiduría plurinominal asignada al PVEM.

Mencionar los nombres de los actuales comunicadores con ese cargo de suplencia edilicia, es herir susceptibilidades, de tal manera que es mejor citar el hecho y dejar en paz la identidad, con el tiempo todos sabrán de quienes se trata.

Este extraordinario y contemporáneo suceso político, nos indica el nuevo rumbo que debemos tomar, quienes de una u otra forma estamos dedicados a la profesión de comunicadores, máxime si se considera que otra compañera de oficio tomó parte en la recién pasada contienda electoral, como candidata a presidenta municipal de El Mante.

Así que; a estrechar nexos de amistad con líderes naturales y dirigentes de institutos políticos, analizar situaciones y buscar afinidad ideológica partidista, aportar lo necesario y proponernos como aspirantes o prospectos a cualquier cargo de elección popular, si alguien puede preciarse de conocer la metodología y problemática ciudadana son los comunicadores, además no se puede pasar por alto las señales que están en el escenario mostrando a los comunicadores como especie en riesgo de extinción… NI MODO, HAY QUE DECIRLO…