El Mante, Tamaulipas, México / Agosto 22 de 2024 / Jesús Avila Murillo / A consecuencia del globalizado problema que se deriva del marcado cambio climático, del cual se han pagado consecuencias muy graves en la mayoría de los países donde se han resentido prologadas sequías y sufrido altas temperaturas extremas, algunos organismos civiles, dependencias oficiales y diversos sistemas de gobierno, han organizado y puesto en marcha campañas y todo tipo de acciones orientadas a reforestar el globo terráqueo.

Contrario a lo anterior, aquí en El Mante, de manera reciente se registró un contradictorio hecho a esas campañas de reforestación implementadas para contrarrestar el cambio climático, de la manera más sencilla, con o sin permiso oficial, manos irresponsables acabaron con la vida de un legendario árbol de Huizache, árbol con más de 100 años de antigüedad que ningún problema representaba para nadie, más que producir sombra, generar oxígeno y servir de vivienda para aves silvestres.

Dicho árbol se localizaba por la calle Manuel González, entre las calles Tampico y Quintero, de un día para otro quedó convertido en trozos de madera, los que sin duda servirán de leña en alguna cocina improvisada.

Lamentable este hecho, debido a que en esta Ciudad no existe ninguna autoridad que cuide el medio ambiente, se tal manera que se derriban árboles con varias décadas de vida, por la sencilla razón de que botan hojarasca en alguna de las estaciones del año, hecho que resulta molesto para las personas que durante años se vieron favorecidas con las bondades de la presencia de esos árboles.