HAY QUE DECIRLO. – Pasó octubre, llegó noviembre, se presentó diciembre, enero quedó atrás, febrero concluyó y se consume marzo, seis meses transcurridos y es tiempo de que la 4T no aparece por El Mante.

En el tiempo consumido estando de gobernador Américo Villarreal Anaya, las clases vulnerables de El Mante de manera tajante, quedaron fuera de los apoyos alimentarios que el gobierno estatal proporcionaba.

Dentro de los ajustes administrativos del gobierno de Tamaulipas, se determinó reducir el presupuesto destinado para los planteles educativos.

Medio año, si, medio año ha pasado y el ejecutivo estatal ha dejado en claro su divorciamiento político de El Mante, su sistema de gobierno municipal y de sus habitantes.

En ese lapso, la 4T se ha concretado al paulatino posicionamiento de familiares, amigos y compadres, en dependencias oficiales del estado y organismos civiles, con la mentalidad, muy al estilo PRI, de contar con una estructura política «segura», que pudiese darles el triunfo electoral en el venidero proceso.

Si algo constructivo, digno de ser mencionado, ha realizado el gobierno de Américo Villarreal Anaya, lo habrá hecho en algún municipio gobernado por MORENA, dejando en abandono total a municipios donde su sistema de gobierno es contrario a lo que representa la 4T… NI MODO, HAY QUE DECIRLO…