HAY QUE DECIRLO. – Una vez más, en nuestro duro trajinar como comunicadores, estamos abordando temas informativos que pueden herir susceptibilidades y dar pauta a probable cobro de factura. Por ahí dicen; «no llores antes de que te peguen», sin embargo, es una medida preventiva muy válida, por estar en total desventaja, cuando solo poseemos la razón, una pluma, un trozo de papel y un celular, como armas o equipo de trabajo.

Algunos de nuestros escasos lectores preguntarán; por qué no lo dijiste antes? Sencillo, existía un convenio publicitario entre el Ayuntamiento mantense en su trienio 2018-2021, con el prestador de servicios, en este caso, el autor de esta publicación.

En ese dicumento oficial que se firmó desde el inicio de la administración pública municipal presidida por Mateo Vázquez Ontiveros y, que se refrendó los años siguientes, había un reciproco compromiso; el prestador de servicios a cumplir con la divulgación de las actividades oficiales del ayuntamiento y DIF-municipal, y el ayuntamiento a pagar por estos servicios de manera oportuna cada mes.

El caso es que se llegó al último mes del trienio de gobierno municipal en referencia y, mientras se ha cumplido por nuestra parte con el compromiso dictado en el convenio, el ayuntamiento de manera sencilla, dice no estar en condiciones de cubrir sus adeudos.

El rompimiento de ese convenio mutuo, en nuestro caso, nos permite realizar sin tapujos nuestra labor informativa, dando cuenta de las realidades que se vivieron en el trienio 2018-2021. Ya no existe compromiso alguno.

Lo realmente preocupante es que; llegase a darse una reacción violenta en nuestra contra, por parte de quien se sienta ofendido en este agonizante ayuntamiento.

Creo que nuestro texto es bastante claro, aquí solo escribe el prestador de servicios, no mi esposa. No mis hijos. No otros familiares… NI MODO, HAY QUE DECIRLO… (P.D.) NO SOY NINGUN «CHAYOTERO», soy un modesto comunicador…