Han sido 10 meses consecutivos y un par de días del presente año transcurridos, en los que ha sido notable la ausencia de comerciantes foráneos invasores por tradición, de los espacios en el principal centro de convivencia familiar con que cuenta en esta ciudad, como es el caso de su plaza de armas.
Cabe decir que; de no ser por la actual contingencia sanitaria, en esta época del año, los principales andadores de la plaza principal estuviesen invadidos ya por las barracas de comerciantes venidos de otros lares.
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