Ciudad Mante, Tamaulipas, México / Enero 12 de 2020 / JAM / La nueva generación de mantenses generadora de polución que está acabando con el medio ambiente, tratándose de personas carentes de cultura, respeto, disciplina y amor por el entorno.
Culpar a esos nuevos mantenses de la brutal contaminación de canales, de espacios baldíos, de áreas verdes y demás sitios que conforman nuestro entorno, por tirar basura y todo tipo de desechos, no es una denuncia aventurada, es una denuncia que se puede probar en cualquier momento.
Solo basta recordar que los viejos, o antiguos mantenses, como se determine definirlos, sin temor a contraer alguna enfermedad bebíamos agua de cualquier canal de riego, incluso en algunos sectores donde no llegaba el sistema de agua potable, sus residentes se abastecían de agua de cualquier canal cercano para utilizar el vital líquido en los quehaceres domésticos.
Esa anterior generación de mantenses sabia de educación adquirida en el seno familiar, sabía de respeto a todo lo que no le pertenecía, sabía de respeto a Leyes y Reglamentos, así como a las personas adultas y a quienes representaban la autoridad, eran valores mamados en el seno familiar.
Hoy; encontramos basura hasta en el interior de los hogares, desorden en todos lados, caminando, parados en cualquier lugar, sentados en algún lugar público, trasladándose en bicicleta, motocicleta, auto, camión, autobús, etcétera, es momento propicio para botar en la vía pública, el cercano canal, el jardín de la plaza, el solar del vecino, el envase de plástico que contenía el refresco que se bebía, el vaso del que bebíamos agua, o contenía fruta, el papel que envolvía los tacos y todo tipo de desechos, así somos hoy en día los mantenses.
Es verdad que El Mante tiene mucho que ofrecer, que mostrar, que presumir, pero también es cierto que cuenta con muchas cosas de las que avergonzarse, como la contaminación con basura de todo tipo en los canales de riego, principalmente en esa canaleta que proviene del Ingenio Mante, frente a la alameda Miguel Alemán, cuyas aguas no se ven a simple vista, debido a que la superficie está plagada de plásticos de desecho.
¿Se atrevería algún mantense de hoy en día a beber agua de cualquier canal de riego, como antes lo hicimos en pasadas generaciones…?
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