Ciudad Mante, Tamaulipas, México / Octubre 07 de 2019 / JAM / Hasta dónde llegará la tolerancia de las autoridades, permitiendo que particulares se apropien de bienes municipales, en este caso, de espacios pertenecientes a la vía pública.
Caso concreto, se observa por una callejuela, o callejón que se localiza en la margen sur del bulevar Enrique Cárdenas González, entre las calles Díaz Mirón y Anáhuac, precisamente, frente a lo que fuese una empresa automotriz denominada Chrysler.
En este lugar desde hace años, permanece establecido un comerciante expendedor de tacos, se posisionó en lo que pudiese ser la entrada o salida de la referida callejuela, la que carece de nomenclatura, pero no deja de ser vía pública perteneciente al municipio.
Esta misma callejuela como ya se dijo, colinda al norte con el bulevar Enrique Cárdenas González, al sur, con la vifurcación que produce la calle Díaz Mirón, la Guerrero y la propia callejuela.
En este tramo de vía pública aproximado a una cuadra, se localizan varios hogares, cuyos moradores jamás han visto se le conceda mantenimiento, de tal forma que la maleza cubre gran parte de esos espacios, otros más lo ocupan montones de basura y por lo general en época de lluvia es sector inundable.
La presencia del comerciante vendedor de tacos de hace muchos años, dejan entrever que cuenta con algún permiso oficial con carácter vitalicio, porque tiene piso de cemento, de forma provisional instaló un lavamanos cuyas aguas residuales las orientó con un trozo de tubo PVC, para su descarga a cercana alcantarilla del drenaje sanitario.
El caso es que de concederle el uso apropiado de vía pública, estaría sirviendo para el desfogue vehicular que proviene de los rumbos de la ex estación de ferrocarriles y de la propia calle Guerrero, con ello se estaría recuperando esa parte de la ciudad que es patrimonio del pueblo.
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